Desde que tengo uso de razón, el fútbol siempre ha significado arraigo popular. Un espacio donde no existen muchos requisitos para contagiarte y se disfruta desde el más mínimo conocimiento. Con las redes sociales pasa lo mismo. Estas actividades tanto recreativas como digitales son por y para la gente; y seguro se quedarán ahí por mucho tiempo. Pero, ¿se han imaginado alguna vez lo que sería que estos dos mounstros se fusionen? De hecho, en el mundo ya se está dando.
Hoy en día es impensado para un club de fútbol que se maneja de manera más o menos decente no tener un Community Manager que mueva sus redes sociales. Esto es interesante porque es una manera de conectar con el espectador que está detrás de su equipo. Pero no todo el trabajo está ahí.
En los clubes más importantes del mundo, se habla de una expansión de marca a través de las redes. Esto se puede desglosar en una razón muy lógica: no existen barreras para difundir.
En una entrevista a Luis Fernando Sainz, Presidente de La Liga en España, menciona que clubes grandes como el Real Madrid y el FC Barcelona vienen llegando a países que anteriormente era muy difícil de acceder gracias a Twitter. En espacios como el medio oriente, sin el poder de las redes sociales, hubiese sido prácticamente imposible expander la marca para poder ganar adeptos. Estos dos clubes vieron una posibilidad y crearon una cuenta en idioma árabe para empezar a informar las noticias más relevantes. Esto significó un crecimiento en seguidores y además, súmarle una cuota de devolución “tácita” a la inversion de sponsoría de Fly Emirates (Real Madrid) y Qatar Airways (FC Barcelona) que son de esta zona geográfica del mundo.
Se puede decir que las redes sociales tienen algo que muy pocos medios de difusión en el mundo pueden jactarse. Ser globales. El fútbol también lo es, así que la combinación de estos puede ser una fuente de rentabilidad sin límite. Solo queda esperar.