Hace poco más de una semana, y con este divertido tweet, Disney+ oficializaba su llegada a Latinoamérica.
La nueva plataforma de streaming de Walt Disney Company estará disponible desde el 17 de noviembre en toda la región. Un competidor más que busca hacerle pelea (y vaya que tiene cómo) a Netflix, Prime Video, HBO y Hulu. Además de los clásicos de toda la vida, tendremos a nuestra disposición las películas de Marvel y la majestuosa saga de Star Wars.
¿Hay algo de novedad en esto? ¿No es simplemente otra plataforma de series y películas más? ¿Acaso el universo que existe alrededor del espacio digital es tan reducido que solo admite producciones audiovisuales? Lo más probable es que nos hayamos acostumbrado tanto a este tipo de contenido, que responder estas preguntas nos resulte sencillo. Aunque, según lo que ha venido sonado en los últimos días, nuestra percepción podría cambiar, y todo gracias a lo que el nuevo engreído de la familia Disney podría significar para su competencia.
Para ponernos en contexto, en marzo del 2019, ESPN compró la 21st Century Fox por más de 71.300 millones de dólares ¿Quién estaba detrás de esta operación? Disney, la compañía es dueña de ESPN desde 1996. Es por ello que hace unos meses por la Copa Libertadores, pudimos escuchar los relatos de Mariano Closs junto a los comentarios de Quique Wolff por Fox Sports, algo que parecía impensable. Las dos cadenas no son solo dueños de las transmisiones de la Libertadores y la Copa Sudamericana, tienen además los derechos de las ligas y torneos de fútbol más importantes del mundo: la Serie A, La Liga, la Bundesliga, la Ligue 1, la Premier League, la Champions League y la Europa League.
¿Y esto qué tiene que ver con las empresas de streaming? Absolutamente todo. Si bien Disney es la que cuenta con todos estos derechos de transmisión, el primero en dar el gran paso no ha sido Disney+. Netflix ha visto aquí una amenaza, y, por consiguiente, una oportunidad enorme de crecimiento y expansión. Es cierto que no cuentan con estos gigantescos canales deportivos de alcance global, pero si cuentan con la realidad de ser la compañía de transmisión digital más grande e importante del mundo.
Netflix ha sido la primera en dar el batacazo en tratar de llevar el futbol al espacio digital de manera masiva. La última semana de julio, el grupo que posee los derechos del fútbol francés, Mediapro, inició negociaciones con la Ligue 1 de Francia para que los partidos del campeonato galo se transmitan en vivo y en todo el territorio francés a través del site estadounidense. Además de pasar estos encuentros, a esto se le añadirían las transmisiones de la Champions y la Europa League. Esto ya debe de haber resonado muy fuerte en las oficinas de Disney+, y la marca tendrá que elaborar algún tipo de estrategia para que el deporte rey también sea parte su oferta, aprovechando que cuenta con ESPN y Fox Sports.
Esto abre el panorama completamente y le mete presión, no solo a Disney+, sino a todos los espacios digitales que buscan renovarse constantemente y desarrollar así nuevos contenidos que logren que cada vez más personas se conviertan en suscriptores de sus sites. ¿Qué tal sería ver la Libertadores por Disney+? ¿La Copa América a través de Netflix? O acaso, ¿La Liga 1 peruana por Prime Video?
La nueva era de las transmisiones deportivas parece haber empezado y se podría decir que el primer partido lo va ganando Netflix a Disney por 1 a 0. Pero el partido acaba de empezar. Disfrútelo desde el sillón de su casa. La pelota ya está rodando, digitalmente.